mecaNOracismo

los mecánicos del CuartoINcierto presentamos la propuesta:



En la sesión de clausura de las Jornadas Antiracistas del 4 de Abril en el Patio Maravillas (Calle del Acuerdo 8, Metro Noviciado. Barrio Malasaña) a las 21 hs, os esperamos: todo ser vivo que ese día pulule por Madrid y crea en un mundo lleno de diferencias está invitado a nuestra performance.

amazona embotada

Encuentro una chica descalza que no quiere más botas. Y sospecho que le gusta la lluvia, la fotografía, el color verde y los payasos felices. Quiero decirle que no tiene nada que hacer, que las piedras acabarán quemando su suave piel. Cálzate, y no remuevas la arena de mi reloj. Y sin embargo, se rie, y salta toda la noche. Me olvidaré de tí, y se rie. No sé quién eres, ni me importa, y sigue sonriendo feliz, como una tonta. No la odio, como al resto de sombras, me causa extrañeza... ¡Mañana te habré olvidado! No le importa, me dice, volveré cada noche hasta que recuperes la memoria. Me pregunto si no sabe el peligro que corre.

aterrizaje infantil

La infancia está muy lejos, en el fondo del pozo. Porque no fue tan infeliz como lo que vino después. Porque si recuerdo el principio, tiendo a pensar en el nudo que desenlaza en mi estado actual. Ese no era yo, ni el otro, ni el de más acá. Todo pertenece a otro planeta.

peinetaparaiso

Un regimiento de peinetas pueblan el paseo
como radios recogen el silencio de la madruga
y se cobijan al amparo de la mantilla
peinate paraíso
redentora.

auto-retrete


soy el feto que tengo entre mis manos
al que limpio de pedazos de espejo
en los que se refleja nuestra madre.
dicen: naciste sola
y te convertiste en abrazo sucio
dedos ceniza virus
el alcohol que emana de las voces de los otros.
ese cuerpo formado a base de chinchetas
que recorre una esponja
y que el médico observa con los ojos en blanco
guantes de látex
latidos ajenos en monitores prestados
tres kilos ochocientos
es el peso de tu alma de peluche
hermana-madre-parturienta-enferma
nuestra es la sangre pegada en el zueco

sin olfato

No soy muy grande físicamente. Mi nariz ocupa poco espacio, es la postiza la que hace que mi rostro llame algo la atención y evita que la gente me pise. No me sirve para nada más. No huelo. Me guío por los sonidos y el tacto, y por la mala vista de mis recuerdos y mis ojos rasgados. Al despertar, en cuanto me acostumbré a la luz, grité. Aquella nariz era tan grande como mi pecera. Creí que una bestia iba a devorarme. No, no iba a hacerlo, otra bestia aún mayor la había devorado. Seguí gritando hasta que perdí la voz. La perdí en pocos segundos. Mi garganta está sin uso y si me cuesta hablar, gritar fue un sobreesfuerzo. El mundo exterior a mi jaula protectora de cristal no sólo mastica carne, también sonidos. Me levanto y corro porque sé que no estoy a salvo. Me lo huelo.

rasgo de lo leve

Paseando por la playa en Lanzarote, hice fotografías a las marcas que el mar había dejado en la arena. Descubrí una pequeña pluma blanca, mojada. El agua del mar al retirarse había dejado una huella como si la pluma hubiese escrito algo. Un rasgo largo y fino que se perdía levemente. Capté el instante mágico con la cámara. En mi cabeza algo se puso a funcionar sin saber muy bien qué era. Lo dejé pasar. Años más tarde, observando la fotografía, se me ocurrió realizar un cuadro en el que expresase con inmensa ternura, el legado final de una bailarina en sus últimos días. La pluma blanca del ave, olvidada en la arena, separada ya de su dueña, mojada, marchita, despeluchada, nunca más sostendrá el vuelo. Antes de desaparecer bajo la arena, el mar se presta con una ola, como una hoja en blanco, a que la pluma escriba sobre la arena su mensaje final. Escrito sólo para mí. Para mis ojos. Para que nunca lo olvide. Para que os lo cuente a través de la pintura. ¿Quién toma el relevo?


Óleo sobre lienzo, 89 x 116 cm, 2005.

migas de pan



"Olvido Pan,
No porque me falte memoria, porque no sea capaz de recordar. No.
Soy Olvido Pan por necesidad. Contemplo las cicatrices del tiempo, del amor mal vivido, las llagas de las caricias no sentidas, heridas de la ausencia, uñas mordidas del tiempo esperando.
Soy Olvido por necesidad de olvidar. Despertar un día sin recuerdos. Un día de borrón y cuenta nueva. Un día bajo el cielo cyan, sin nubes. Un día contra el cielo.
Tiempo de la amnesia. De no recordar siquiera que alguna vez tuve un nombre. De no saber cómo se da un paso. No saber lo que es caminar.
También soy Pan.
Pan básico, elemental. Pan que recibí al quitarme la leche que me dieron. Pan blandito
o duro,
pan bendito,
bendito pan.
Pan que es todo. Y de todos. Que me pusieron bajo el brazo. Que no pedí.
Que me disteis para llamarme tonto. Migajas de pan. Pan rallado."

antes del incendio



julio

una cartografía
mi-tu piel
mi-tu mapa
simetría y centro
no recordamos nada
conocido

(aunque hubo una época)


octubre

la oligarquía de los sutiles
en un trazo brusco, violento
pergamino tu espalda
pincel mis dedos

tu belleza está en todas partes


enero

agua, vacío de forma
ascesis del relámpago
un corazón espera
tú sigues el camino recto que pasa entre las higueras

alguien me da la mano
mantendré tu sombra limpia
no tengo nada pensado para ti


mayo

no puedes parar de reír, no puedes parar

alrededor de ti gravitan
los pájaros que escaparon del incendio



sueños garrafales

Quedan pocas horas para sentir el amanecer en mis ojos. Ay, ay, empiezo a pensar, a ir hacia atrás. Recuerdo un amanecer en el que hacía reir, recuerdo cómo un niño jugaba con mi nariz. Ay, ay. Me duele la cabeza. Corre Payaso corre, corre hasta el rincón y bebe hasta que no quede nada. Destruye esta noche, destrúyelo todo. Sabe a cadáveres, a restos descompuestos, mi estómago se queja pero mis ojos se cierran. Por una vez no quiero recordar. Este amanecer no quiero verlo. Se parece al antíguo. A cuando bebía palabras y gestos, cuando sorbía miradas cariñosas y esperanzas amables. No, no quiero pensar que se parece porque no se parece en nada. No quiero recordar. Cierro los ojos y me siento junto a mi viejo garrafón. Está vacío por fin. ¿Qué haré la próxima vez que los demonios me visiten? Pero dejo de pensar en la próxima vez. Dejo de pensar. Duermo.

interior/exterior