H-2008






H-2008

entraré por la puerta de atrás del hotel esta noche
para ver damas de laboratorio y figuras sin aire
cómplices, envidan, juegan a secretos y mentiras
bastan dos minutos para envejecer veinte años
futuro engulle presente y en la trastienda lo saben

nueva puerta abierta de un paseo intransitable
paredes de mujeres que tiemblan en grandes espejos
mas bien madres que lamentan dar vida
por cada intento un fantasma errante y vencido
usado para hacer por hacer y no servir para nada

mis pasos prolonga más la distancia a tu cama
el silencio anuncia que pasará lo que temo
hubiera deseado que la nieve me enterrara esa noche
y congelara el tiempo dueño de todas las salas del sur

tenías que haberte escapado a morder la secuencia de enero

prefiero quedarme en la parte de la subsistencia 
aquí el blanco se prolonga a otra vida
las cosas son como son mudas, crudas, despiadadas
miente le sol fanfarrón cuando alumbra la puerta
y aplaudimos las vergüenzas permanentes

ya no me importa la nieta de la princesa tártara 
y si la muñeca de Kafka vuelve a la niña
ya no me importa Alicia y su mundo cuántico
o si el pequeño hombre encontró su planeta

estará el calendario parado en los días bárbaros.

momentos sin sonido

Cuando el tocadiscos se estropeó, pensé que sería muy dificil conseguir uno nuevo. Después perdimos toda posibilidad de generar electricidad. Al final, decidí que lo mejor era usar el tam tam de nuestros corazones para generar un ritmo que nos condujera a la esperanza. Cantábamos, nos inventábamos letras... y los viejos discos empezaron a volar, a convertirse en juguetes. Carreras, golpes, risas, heridas fáciles de curar... Me encuentro un antiguo vinilo. Me gustaría cogerlo y lanzarlo muy lejos, pero nadie correría a atraparlo. Está lleno de basura, y yo estoy rodeado de coches y paredes.

aspiraciones sin inspiración

Acabé estropeado por querer aspirar algo que no fuera mierda, como ella, supongo. Supongo también que la instalación eléctrica del bar era demasiado vieja. El líquido por todas partes,el idiota que le dio por encenderla. Es irónico, porque el fuego arrasó el local un día antes de que viniesen los arrasadores de todo lo demás, así que, de algún modo, se salvó de ellos. No entraron a buscar nada, luego no encontraron nada. Qué iban a encontrar, todo parecía viejo e inservible. Locos, salvajes, usmearon de lejos pero no se acercaron lo suficiente como para fisgar debajo de las baldosas de la cocina. Ah, yo eso no lo sabría hasta días después, era valiente, pero no idiota, y me escondí un tiempo. El suficiente para que comenzase a crear mi pesadilla interminable, mi sueño de no querer volver jamás. ¿Mejor hubiese sido quedarme hasta morir de inanición? ¿O salir y correr el riesgo de ser descubierto y troceado? Vivir loco o morir como un valiente estúpido. No pude hacer nada, de verdad, no pude hacer nada. en el momento en que pensé que había esperanza, arrasaron con todo, con el pasado, el presente, y el futuro. Obligarme a querer recordar todo aquello es un suicidio, después de abrir tanto los ojos no sé qué veré cuando los cierre.